Querida Hermana Nuria:
Vos sabéis que en México hay un lugar para vos, un recuerdo y una palabra. En estos momentos, querida Nuria, vos sabeis mejor que nadie, que esto es mas que un recuerdo...es una presencia. Sabeis que siempre hemos sido con vos, porque jamás dejamos de ser Hermanos.
México es solidario en estos momentos, y nos unimos a la fraternal cadena de oración. Recordad, amada Hermana, que los límites solo son impuestos por el hombre, pero el amor, la fraternidad, la solidaridad no conocen de limites, ni tienen sistemas de medida. El amor...simplemente se da y es nuestra responsabilidad hacerlo, tal y como Dios Padre nos lo regala.
Seguimos siendo, Hermana y lo seguiremos haciendo. Pedimos, con el alma en la mano, por la sanidad fisica de tu Hermano y por la salud fisima y emocional de vos y vuestra familia.
Señor, a ti que nada se puede ocultar ante tus ojos, te pido no pases por alto el dolor y la desesperación que ahora son conmigo. Conoces el deseo de mi corazón de ser sanado de esta enfermedad. Te pido ahora por Tu toque sanador. Sé que Tú eres capaz y que así como en los tiempos bíblicos, Tú puedes sanarme.También entiendo que Tú escogerás lo que es mejor para mí. Te pido que a través de esta prueba, me acerques más a Ti – que Tú seas mi consuelo y fortaleza. Te pido que finalmente, pase lo que pase, Tú seas glorificado a través de mí. Te lo pido en el nombre de Jesús, Amén.”
NON NOBIS